Quitar funda, malla o papel

En ocasiones cuando nos regalan un jamón o lo compramos, viene envuelto en una funda de algodón o papel. Si lo vamos a mantener unos días antes de cortarlo, mi recomendación es que saques el jamón de la funda o malla y si además va envuelta en papel, se lo quites.

El jamón es un alimento vivo y es necesario que respire para evitar apariciones de posibles humedades o mohos.

Se conservará mejor si está al aire sin envoltorios.

¿Dónde lo coloco?

Parece una tontería, pero el lugar donde mantengas el jamón antes de abrirlo puede hacer que la pieza adquiera sabores que no deba o que se alteren sus principales características.

Lo ideal una vez la tengamos sin funda o cualquier tipo de envoltorio, es colgarla de una cuerda en un lugar seco y fresco. Cuando el jamón respira homogéneamente por todas sus partes, se conserva mejor.

Una bodega sería el lugar ideal para mantenerlo pero a nivel casero, podría servirnos un trastero o terraza acondicionada.

Es importante que la pieza esté alejada de fuentes de luz o calor directas, como los fuegos de la cocina, para que no se altere.

Huir del calor y de la humedad es fundamental, pero también de los posibles olores, por ejemplo los que se generan en las cocinas. El jamón lo absorbe todo.

Mantenerlo con aceite

Si vas a tardar mucho en consumirlo, un truco que te ayudará a mantenerlo es pasarle de vez en cuando, un trapo con aceite de girasol por toda la pieza. El aceite de girasol es más neutro que el de oliva, de ahí que siempre se recomiende este aceite. El de oliva podría traspasarle sabores al jamón que no le corresponden.

Es una manera de evitar que la pieza se reseque en exceso o que incluso se acortece.

Espero que os resulten interesantes estos trucos y que os ayuden a mantener en perfecto estado, vuestras piezas de jamón.

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